#BOLIVIA / MUNDO – El 17 de abril de 2020 la prensa reportó un horrendo crimen que conmocionó a toda Bolivia. El hecho involucró a una joven de 29 años; según lo relatado, la mujer habría envenenado a su pequeña para evitar que está contará a su progenitor una de sus tantas infidelidades. Gracias al veredicto brindado por la fiscalía del estado, no fue hasta este martes 20 de septiembre del año en curso que la justicia reveló quien era la autora del homicidio.
La hoy imputada quedó identificada como; Gavina M.M., de acuerdo a declaraciones de expertos, la acusada envenenó y mató a la niña de ocho años para evitar que revelara su secreto. Y es que la pequeña sabía que su madre le había sido infiel a su padre.
Conforme al peritaje forense la mujer después de darle de tomar insecticida alteró la escena del crimen para esconder su responsabilidad en el vil asesinato.
Después de dos años el Ministerio Público logró comprobar que Gavina era la culpable del delito de infanticidio. La corte dictaminó una condena de 30 años de prisión en el penal San Roque del mencionado país.
El equipo forense expuso que, la autopsia había revelado que la niña murió por una «asfixia mecánica producto de una obstrucción de las vías aéreas inferiores por contenido gástrico«.
Mauricio Nava Morales, fiscal departamental de Chuquisaca, señaló que «la mujer reconoció haber cometido el delito y solicitó someterse a la salida alternativa de procedimiento abreviado, por ello los miembros del Tribunal dictaron la máxima pena sin derecho a indulto».
El fiscal asignado al caso aprovechó para detallar que el crimen habría ocurrido en horas de la tarde de la fecha antes mencionada frente a sus otros hermanos.
Editado por Noticias la Critica Aruba